El spagat es una parada que usamos ante lanzamientos en proximidad. Suele ser una acción sorpresiva, en la que buscamos ocupar el máximo posible de la portería.
Partiendo de posición de base, nos adelantamos rápidamente y nos impulsamos verticalmente con ambas piernas. Abrimos en el aire las piernas, con las manos lo más separadas posible. Las piernas no suben rectas, si no que intentamos subirlas en dos tiempos. Primero el muslo y después el resto de la pierna (como cuando paramos a media altura con la pierna).
Para poder realizar este gesto es importante una buena flexibilidad y fuerza en el tren inferior. Una posible progresión de trabajo puede ser:
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- Saltos verticales con los dos pies a la vez levantando las rodillas
- Saltos verticales con los dos pies a la vez levantando las rodillas separadas
- Un paso y salto vertical con los dos pies a la vez levantando las rodillas separadas
- Un paso y salto vertical con los dos pies a la vez intentando levantar las piernas en dos tiempos
- Un paso y salto vertical con los dos pies a la vez intentando levantar las piernas en dos tiempos. Los brazos arriba para completar el spagat
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Es importante que en el paso que demos apoyemos bien los pies para equilibrarnos y no saltar hacia delante (más complicado levantar las piernas).